Consiste en enseñar conceptos, lenguaje, productos financieros y estrategias útiles, con la finalidad de desarrollar las habilidades que se requieren en la toma de buenas decisiones, construyendo, así, el camino del éxito en las finanzas.
Consiste en el desarrollo de “la capacidad para administrar tu dinero, dar seguimiento a tus finanzas, planear para el futuro, elegir productos financieros y mantenerte informado sobre asuntos financieros”.
Se inculca en las decisiones financieras en familia, en la mente de los hijos se genera aprendizaje duradero. Una familia puede mantener sus finanzas sanas cuando establece comunicación entre sus miembros.
Ésta es el segundo lugar donde los niños aprenden a tomar sus decisiones de vida. Incluso si no se lleva una materia en específico que trate con los temas financieros, se enseña de otras formas
Los juegos pueden resultar muy útiles para fomentar el aprendizaje, puesto que cuando la educación financiera se integra a la vida cotidiana y se hace de una manera divertida o casual suele ser más efectiva y benéfica.